por La suerte de pertenecer a la Asociación de Bloggers de Viajes de Galicia, GaliciaTB, es que, a veces, nos juntamos algunos socios para descubrir o redescubrir rincones de esta tierra tan bonita en la que vivimos.
Hace unas semanas Millán Dasairas, uno de los socios, nos comentó que estaba organizando un pequeño blogtrip a su pueblo natal, Cangas, en la comarca del Morrazo. Desde aquí queremos agradecerle su gran organización y también darle las gracias a las empresas que colaboraron con nosotros: Turismo de Cangas, el restaurante italiano Il Popolo, O Colmado de Marujamaría (una tienda con productos 100% gallegos y ecológicos), al Hotel Airiños y, sobre todo, a los Apartamentos Rodeiramar.
Hay 12 lugares de visita obligada en Cangas y sus alrededores: la estatua ecuestre del Apóstol Santiago, el cruceiro de Singulis, O Reloxo, la escultura de Félix Soage Villarino, la Casa de Patín, la Plaza de Abastos, la Casa da Bola, la Excolegiata Santiago de Cangas, la capilla del Hospital, el paseo marítimo de Aldán, el cruceiro de Hío y el monte Facho.
Nosotros empezamos la visita en la Excolegiata. Es un templo de estilo gótico, aunque su portada es renacentista.
Dimos un paseo por el centro en donde pudimos comprobar que todavía hay lavaderos que son usados a diario para lavar la ropa y descubrimos las primeras casas del pueblo, edificadas directamente en las rocas.
Hay una tipología de viviendas que se ven con frecuencia en las Rías Baixas, son las casas con «patín». Estas viviendas están dispuestas generalmente entre medianeras y tienen planta baja y un piso al que se accede por una escalera de piedra exterior (o patín). En el bajo se almacenaban los aparejos de pesca y en el primer piso se encontraba la cocina, la sala y las habitaciones.
La plaza de abastos llama la atención por su colorido y por estar rodeada, como no, de gaviotas. Fue construida en 1925.
La capilla del Hospital formó parte del antiguo hospital construido para ayudar a los peregrinos, pobres y enfermos. La capilla data de 1711 y hoy en día se pueden ver exposiciones de fotos en su interior.
Antes de comer nos acercamos a la antigua conservera de Massó. Hoy en día está abandonada, lo cual es una pena porque el edificio llama poderosamente la atención y en su momento dió trabajo a miles de personas de la comarca.
Cerca de la conservera se encontraba la ballenera. Sí, en Galicia había varias balleneras. Curioso, verdad?
Después de comer y ya que la lluvia hacía acto de presencia, decidimos olvidarnos de la ruta de senderismo que teníamos preparada y dar un breve paseo por el Bosque Encantado de Aldán. Este pequeño castillo es en realidad la casa de juguetes que los dueños del pazo al que pertenecía este bosque le hicieron a su hija.
Aunque no pudimos continuar la visita debido a la climatología, parece ser que hay una ruta de senderismo que parte de allí mismo y en la que podrás ver varios molinos.
El cruceiro de Hío fue esculpido en 1872 y es de los más importantes que se conservan en Galicia. Aunque la foto salió muy oscura, el cruceiro está esculpido en tres grandes bloques de piedra que muestran la historia de la Cristiandad.
Por último, nos acercamos al Faro de Cabo Home, en la Costa da Vela. Llovía bastante y hacía bastante frío, pero aún así las vistas valieron la pena.
Desde Cabo Home podemos ver muy de cerca las Islas Cíes. Y si todavía no habéis ido, no esperéis más a hacerlo 😉
Qué bonito es el pueblo! Lo de las ballenas por el norte ya lo había oído en otras zonas del Cantábrico. al parecer era muy común la pesca de ballenas hace tiempo por el norte de España.
Un abrazo