Dolomitas en 6 días

Hace unos días os contábamos cómo había sido nuestra experiencia conociendo las famosas Cinque Terre, pero antes le habíamos dedicado 6 días a recorrer los Dolomitas. Os venís?

Dolomitas: introducción

Según la wikipedia, Las o los Dolomitas​ son un conjunto de macizos montañosos en los Alpes orientales italianos, al sur de la cadena principal alpina, casi en su totalidad incluidos en las regiones del Veneto, Trentino-Alto Adige y Friul-Venecia Julia, con una pequeña parte también incluida en Austria.

Los Dolomitas se extienden por las provincias de Belluno, Bolzano, Trento, Udine y Pordenone. Este conjunto de cadenas montañosas se llama así por el geólogo francés Déodat de Dolomieu, que por primera vez, en 1795, estudió y analizó la roca predominante en esta región, la dolomía. El 26 de junio de 2009, fueron declarados Patrimonio de la Humanidad.  Un día después, lo sería la Torre de Hércules.

Día 1: Trento y Bolzano

Aunque no está en los Dolomitas, la primera parada fue Trento. Habíamos volado a Bérgamo y aunque nos hubiese gustado hacer alguna visita corta en el Lago di Garda, había muchísimas retenciones en todas las salidas de la autopista por las que pasamos, por lo que decidimos continuar hasta la ciudad trentina.

En Trento nos dedicamos a dar un paseo por su centro histórico y visitar el castillo del Buonconsiglio (10 €), al que entramos gratis por ser el primer domingo del mes. Desde su «ventana veneciana» se atisban unas vistas de escándalo, también es famoso por las representaciones de los meses del año situados en la Torre del Águila (2,50 € que se pagan sea cual sea el día de visita).

Hay otros castillos en la zona de Trentino, pero no pudimos visitarlos por falta de tiempo (Thun, Beseno, Stenico y Caldes).

El centro histórico de la ciudad está restringido al tráfico, por lo que tendremos que aparcar en los parkings disuasorios y caminar o pillar un bus lanzadera hasta el centro. El coste es anecdótico, ya que se paga 0,50 €/ día entre semana y 1 €/día los fines de semana.

Lo más bonito de Trento es la Plaza del Duomo, con la catedral de San Vigilio. Allí se encuentra también la réplica de la Fuente de Neptuno. Si queréis ver la original, tendréis que hacer hueco para visitar el castillo de Thun.

Tras comer y dar un paseo por Trento, nos dirigimos a Bolzano, en donde dormiríamos las siguientes 4 noches. Podéis reservar vuestro alojamiento en Booking desde este enlace.

Día 2: Alpe di Siusi

Las carreteras para acceder a los sitios más visitados pueden estar cortadas de 9 a 17 h, como es el caso de Alpe di Siusi. Nosotros optamos por subir en teleférico desde Siusi allo Sciliar hasta Compaccio o Compatsch, salvando un desnivel de 850 m de altitud (24 €, ida y vuelta). Se puede aparcar gratis, pero nosotros no encontramos sitio y lo hicimos en el parking de pago (6 €/día).

Algo que nos llamó la atención es que buena parte de la población local habla en alemán y por este motivo, los lugares están en ambos idiomas, Compaccio o Compatsch. Nosotros no lo sabíamos y nos chocó bastante cuando saludábamos en italiano y nos respondían en alemán, mezclado con un poquito de inglés y otro poquito de español, fueron unos días un poco compusos lingüisticamente hablando. La zona fue hasta la I Guerra Mundial, territorio austro-húngaro.

Desde Compaccio intentamos realizar la ruta 30, pero no estaba muy bien indicada. Llegamos a nuestro destino en Saltria, pero la vuelta la hicimos en bus porque no nos apetecía volver por el mismo camino. Hay transporte público entre las principales localidades y puntos turísticos (3 €/billete, aunque si compras el de 3 días te cuesta 7 €). La ruta a pie fue de unos 5 km y nos llevó poco más  de 1h30. El paisaje es espectacular.

Día 3: Val di Funes

Si pensamos en el Val di Funes, nos vendrá a la cabeza una de las estampas más famosas, la de esa iglesia en el medio de un gran valle, totalmente solitaria,  San Giovanni in Ranui. El parking por 2 horas cuesta 2 € y si queremos entrar en el recinto donde se encuentra, 4 € más. Se puede ver sin pagar esos 4 euros, pero las visitas no serán lo mismo, ya que se encuentra bastante lejos.

No hay nadie en taquilla, se trata de un cajero con un torno que se abre tras pagar el importe.

Después de dedicarle un buen rato a pasear por los alrededores de la iglesia de San Giovanni in Ranui, nos dirigimos hacia Zans o Zannes, puerta de entrada al Parco Naturale Puez- Odle o Naturpark Puez- Geislerl. Aquí decidimos hacer otra ruta de senderismo, pero tal y como nos había pasado el día anterior, las indicaciones no coincidían, por lo que acabamos haciendo una mezcla  de rutas (unos 5,5 km en 1 h30) un tramo del Adolf Munkel Weg y el Naturerlebnispfad. El parking cuesta 8 €.

Día 4: Lago di Carezza

A estas alturas ya os habréis dado cuenta que se paga en todos lados, no? Pues en el Lago di Carezza no iba a ser distinto, esta vez pagamos 4 € de aparcamiento.  De camino hacia el Lago di Carezza nos maravillamos con el paisaje y descubrimos una iglesia, de la que no sabemos ni el nombre, con poco que envidiarle a San Giovanni in Ranui y es que las paradas improvisadas en lugares poco conocidos, nos suelen deparar sorpresas inesperadas.

Aquí caminamos por un pequeño sendero alrededor del lago, fueron algo menos de 4 km en 1 h escasa.

La tarde la dedicamos a relajarnos y pasear por Bolzano, igual que el día anterior. Y aunque la ciudad no es especialmente bonita, dispone de todos los servicios y de buenos restaurantes. Nosotros escogimos, de casualidad, todo hay que decirlo, una de las trattorias mejor valoradas, la Trattoria Filo d´Olio.

Día 5: Lago di Braies y Lago di Misurina

Y de lago en lago y tiro porque me toca. Este día empezamos con la ruta circular alrededor del Lago di Braies. Este es uno de los puntos más conocidos de los Dolomitas, y esto se ve reflegado en el importe del estacionamiento, 15 eurazos. La ruta es fácil y las vistas son espectaculares, por un lado el color del agua y por otro las montañas. Definitivamente, vale la pena. Caminamos unos 3 km en una 1h15.

Desde allí nos dirigimos a nuestro hotel en Cortina d´Ampezzo. Abandonamos Bolzano y el Tirol Sur o Alto Adige y entramos en el Véneto, en donde ya habíamos estado hace años visitando Verona y un par de veces, la ciudad de los canales por antonomasia, Venecia.

Nuestro hotel en Cortina fue increíble, era un alojamiento de agroturismo, con unas vistas de escándalo a las montañas y con un desayuno excelente, Jägerhaus Agriturismo.

Tras descansar un rato en la terraza de nuestra habitación disfrutando de las vistas, decidimos hacer una pequeña excursión, la visita al Lago di Misurina (parking 2 €/h o 14 €/día). De nuevo, la ruta nos llevó alrededor del lago, menos de 3 km en 1 horita. Ya había anochecido cuando volvimos a Cortina, por lo que dimos un breve paseo, cenamos y a dormir. Cortina fue bastante famosa por ser un punto de encuentro de famosos de todo tipo, con tiendas de lujo y un aire un poco decadente a estas alturas.

Día 6: Tre cime di Lavaredo

Este día era el plato fuerte de este viaje, la ruta de senderismo que recorre las Tre Cime di Laveredo (parking, 30 €). La ruta, supuestamente, fueron 10 km, pero a mí me dió la impresión de caminar mucho más. Tardamos 4 horas en terminarla (siguiendo los senderos 101 y 105), pero hicimos muchísimas paradas, fuimos a un ritmo muy lento y también comimos de bocata en el medio de la ruta.

Hay mucha gente que no la realiza completa, sino que llega al punto en donde se ven más cerca (poco después de pasar el primer refugio). Desde el aparcamiento hasta aquí te llevará 1h30.

Presupuesto

En este último viaje por Italia, hemos estado 10 días y el presupuesto, bastante simplificado fue:

Vuelos Santiago – Bérgamo – Santiago con Ryanair, con maleta de mano: 249,58 euros los dos

Coche de alquiler con seguro a todo riesgo y segundo conductor: 477,00 euros

10 noches de hotel: 1080,00  euros

Y si sumamos, comidas, gasolina, aparcamientos, entradas…nos quedamos en 1308,53 €/persona

 

Verónica

Escribiendo sobre viajes, escapadas y rutas de senderismo desde 2009. Técnica Superior en Agencias de Viajes.

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