Hace unas semanas dejó por fin de llover en Galicia, así que aprovechamos un sábado para irnos de excursión a un sitio al que le teníamos muchas ganas, la pequeña aldea de O Cebreiro, en el ayuntamiento de Pedrafita do Cebreiro y en pleno Camino de Santiago.
Pedrafita do Cebreiro está situada en el centro de las sierras de Os Ancares y O Courel, por lo que los paisajes están más que garantizados. También es aquí donde nacen dos ríos: el Navia y el Lor.
En la aldea de O Cebreiro destaca Santa María la Real. Es una iglesia de estilo prerrománico fundada, probablemente por los monjes benedictinos del S. IX. El santuario cobra importancia en el s.XIV porque supuestamente tuvo lugar allí el milagro del Santo Grial. Cuenta la leyenda que un día de fuerte temporal de nieve, un monje celebraba misa en la capilla. Un vecino de la parroquia de Barxamaior desafió la tempestad y se acercó a la iglesia. El monje menospreció el esfuerzo del vecino y exclamó: «cual viene este otro con una tan gran tempestad y fatigado a ver un poco de pan y vino». En ese momento la hostia se transformó en carne y el vino en sangre.
En 1486, los Reyes Católicos peregrinaron a Santiago y según la tradición popular la reina Isabel quiso llevar con ella las reliquias de O Cebreiro. Después de unos 20 km, los caballos no quisieron andar más, los dejaron sueltos y volvieron a las puertas de la iglesia, por lo que la reina cambió de idea. Después de esto, los Reyes Católicos le otorgaron continuos privilegios.
Pero sin duda, lo más famoso de este precioso lugar son la pallozas. Son unas viviendas de paredes bajas de piedra en las que se abren pequeñas ventanas y puertas y en las que convivían personas y animales bajo una alta y tupida cubierta de paja, que soporta el peso de la nieve. La inclinación de la cubierta favorece que la nieve vaya cayendo al suelo.
En algunas de ellas hay un museo etnográfico, pero cuando nosotros fuimos estaban cerradas. En su interior se reflejan las condiciones de vida en la montaña.
Tengo unos amigos en Lugo, defensores de los bosques do COurel!! y ya me han dicho que tardo en ir jeje puede que éste Agosto caiga una rutilla por él 😉
Hola, por fín ha dejado de llover jejej. Precioso lugar para caminar y para "huevos con chorizoooo, uhhmmm" jejeje.
Un abrazo, nos vemos en el camino
Vaya paisajes Verónica, una maravilla, a los del sur nos llama mucho la atención las estampas blancas nevadas. Las pallozas son muy chulas y el muñeco de nieve muy simpático, jeje. Pasa por mi blog, tienes una sorpresita. Un besote para los dos 😀
En las veces que he estado en Galicia no había visto las pallozas… Las hay por todas partes o son típicas de ese pueblecito tan chulo?
Un abrazo
Un sitio muy bonito y con tanta nieve, más todavía.
Un abrazo!
Parece que hacía un poquico de frío, ¿no? jajaja
Eso sí, me ha parecido muy bonito.
Un saludo 😉
Me encanta este sitio, chicos. Los amigos de Galissia también pusieron un post sobre esto hace poco y me encantó 🙂 Les decía que los mejores bocadillos de chorizo de mi vida los comía en invierno en Pedrafita cuando iba de excursión los domingos con mi familia. ¡Qué grandes recuerdos! 🙂
Akasha, pues seguro que esa ruta no te decepciona 🙂
Toni, la próxima vez habrá que probar esos huevos con chorizo.
Caliope, a ver cuando volvéis por el norte y os enseñamos nuestros paisajes, jeje.
M.C., las hay en varios lugares, aunque éstas son las más conocidas. Se dicen que son de origen prerrománico, puede que de los castros.
Otra mirada, sí, la nieve le da un aire especial.
Helena, un poquito, pero no tanto como pensábamos, jeje. De todas formas, Luismi me hizo correr bajo amenaza de bolazo de nieve, así que no me enteré mucho XD
Eva, pues podíamos hacer una xuntanza de bloggers gallegos por la zona jeje
Qué paisajes más bonitos que tenéis por allí, veo que os lo pasasteis bien construyendo el muñeco de nieve, jejejeje. 😉